csarbonilla
Becerro
- Registrado
- 20 Jul 2009
- Mensajes
- 14
La última parte, espero y sea de su completo agrado…
La noche durante la cena después del encuentro entre Carlos, Alma y yo, transcurrió con cierta normalidad, al menos para ellos, yo me sentía como “ido”, contrariado, nervioso y con la cruda del remordimiento por la aventura que habíamos tenido. Siempre había sido, en mis dos años de casado, fiel y no me había acostado con ninguna otra mujer hasta que se apareció Almita. Mi esposa Silvia notó mi falta de interés en sus conversaciones y me pregunto que tenía…
-Nada- conteste…
Al acostarme no dejaba de pensar en Alma… no conciliaba el sueño y empecé a escuchar ruidos en el en el cuarto contiguo, donde se encontraba mi cuñada Jazmín, quien debo decir, que es la hermana menor de mi esposa, tiene unos 23 años, soltera, sin novio a la vista, pelo castaño ondulado, estura media, cara bonita y fina…tetas pequeñas pero un culazo fenomenal… la clásica nalgona sin chiches.
Volteé a ver a Silvia, quien dormía profunda y plácidamente, me levante para saber que estaba sucediendo, salí del cuarto y me dirigí a la puerta del cuarto de Jazmín… y logre claramente escuchar el gemido de ella… no me anime a tocar… me quede petrificado!!! ¿Se estará toqueteando? ¿Mi cuñado le estará haciendo compañía? o ¿será alguien más?
¿Qué hago?- pensaba… me acerque y toque la perilla y lentamente le di vuelta…estaba abierta su recamara!!!!! Rogando porque no hiciera ruido la puerta, la abrí lentamente y alcance a ver por el pequeño espacio que deja una puerta apenas abierta y la poca claridad de una lámpara encendida, que se encontraba recostada boca arriba y percibí su cara excitada y el zumbido de un aparato el cual no alcanzaba a ver… si, se estaba dando “justicia por su propia mano”.
Me puso cachondísimo escuchar sus gritos de placer y ver su cara ruborizada, qué era lo único que percibía… mi verga se paro brutalmente, quería entrar y comerle todo su coñito y cogérmela pasionalmente. Pero mi esposa en el cuarto de lado me detenía, aún sentía remordimiento por lo de Alma…
La ví a hasta que concluyó y decidí no correr riesgos, me fui a mi cuarto y no pude hacer más que despertar a Silvia y hacerla presa de mi lujuria. Debo decir que de recordar simplemente lo poco que vi de Jazmín y las imágenes de Alma cuando me la cogía, hizo que durara muy poco el acto y a los pocos minutos me vine abundantemente en el interior de Silvia, quien se dio la vuelta para seguir durmiendo.
El día siguiente transcurrió con normalidad, fuimos a la playa los 5, y me quede con Carlos en una palapa, tomándonos unas cervezas mientras que las mujeres en sus bikinis se bañaban cómodamente. Eran la atracción de la playa, no había hombre o mujer que las mirara, unos con deseos y otras con envida… y es que la verdad… viéndolas objetivamente: que buenas estaban…!!!
Llego la noche y me sentía más animado… la cena, el vino, la plática, hicieron que me despejara y estuviera más cariñoso de lo normal con Silvia.
Al tenor de las copas, que ya eran muchas, nadie se encontraba en su cinco sentidos, Alma propuso jugar "Atrevete".
“Atrevete”, es un juego donde seleccionas una carta cuando te toca el turno y debes aceptar el "atrevimiento" o decir un secreto o pensamiento propio que sea “atrevido” de alguna de las personas que se encuentra jugando… la verdad muy tonto el jueguito, creo que alguna vez lo jugué en secundaria.
Iniciamos el juego y la verdad, estaba muy divertido, hasta que Jazmín osadamente dijo:
- “Mejor… cambiamos los secretos por deshacernos de prendas…”
Me quede anonadado!!! Y más aún porque Silvia asintió alegremente.
Alma empezó temerariamente, cuando fue su turno, en lugar de darle un beso en el pie a su hermana Jazmín, decidió deshacerse de la parte superior del traje de baño.
Cuando menos pensamos, estamos en un camino sin retorno, veo a Silvia sin bragas a Alma en pelotas al igual que Jazmín quien enseña su hermosa puchita bien depiladita con un sólo con un par de calcetas.
Carlos, fue el mejor librado, puesto que aún traía un short puesto, y yo en un calzón. El siguiente reto detonó la pasión de los cinco y lo propuso mi esposa…
- “Que Alma le mame la verga a Carlos”-
No puedo creerlo…!!!! Todos se ríen y empiezo a ver como Carlos se saca su falo y Alma empieza a tocarlo, siento una erección que no puedo evitar que se note, de la cual saca provecho mi esposa quien me acaricia por encima de mi calzón y veo como Jazmín intenta desviar la vista de la acción por pena.
Cuando menos pienso Alma le está mamando el pene a Carlos y le acaricia los huevos y Silvia saca mi verga y juguetea con ella, mientras la beso en su cuello; Jazmín intenta despedirse vanamente, pero es detenida por Carlos quien le dice:
-“Quédate, vamos a divertirnos mejor”.-
Ella contesta indecisa:
- “No se qué va a pensar Beto” (yo)-
Alma le refuta:
- “Anda… no tengas pena… no será la primera vez y Beto lo tienen entretenido Silvia”-
Pensé: Madres…!!!! ¿¿¿o séase que estos 3 ya cogían??
En eso Carlos lentamente baja su cabeza a la altura del vientre de Jazmín, e introduce su lengua en el bizcochito de esta, mientras Alma le da una mamada descomunal.
Estaba cachondismo y quería participar con ellos, pero no sabía cómo reaccionaría Silvia, así que decidí quedarme con ella… mientras acaricio sus senos, deslizo mi otra mano hasta su montículo y jugueteó con su clítoris, pero no puede dejar de reaccionar a mis manos e inmediatamente me bajo a probar su delicioso néctar y acariciar con mi lengua su bello botón.
Estaba tan ensimismado en darle placer a Silvia, que no me di cuenta que Carlos estaba dándole su ración de verga a Jazmín a quien tenía empinada y Alma le acariciaba los huevos… me moría por estar en el lugar de Carlos.
Al notar que los observe de reojo, Alma gateo hasta mi y sin más ni más, y sin pedirle permiso a Silvia, se metió toda mi verga a su boca… era un placer descomunal a una la chupaba y otra me la chupaba… y al fondo, mi concuño y mi cuñada dándose placer… y ésta última gritando abiertamente y teniendo un orgasmo brutal al grado que dejo todo el falo lleno de su néctar blanco.
Carlos, se dirigió hacia nosotros pensé que se cogería a Alma por la posición empinada que tenía y oohh sorpresa se dirigió a Silvia y le dijo:
-“Toma putita… prueba mi verga y los jugos de tu hermana”-
Silvia tomo el pene de Carlos y se los metió a su boca, mientras yo le daba una serie de lengüetazos a su clítoris y Alma me trabajaba los huevos.
Al notar la acción de Silvia con Carlos, me separe y bese apasionadamente a Alma, y al fondo en el sillón donde se la había cogido Carlos, se encontraba Jazmín metiéndose los dedos a su puchita… era mi oportunidad!!!
Levante a Alma y la obligue a que me agarrara la verga y que me dirigiera con Jazmín… llegando al punto donde ésta se encontraba, sabía a lo que iba y me recibió con una senda mamada y se le unió Alma… era un placer inmenso!!! Dos hermanas mamándote la verga no se da todos los días!!!
Alma se levanto y me empujo al mueble, y me montó… no había caído en la cuenta que Carlos estaba en el piso haciendo presa una enorme cogido a mi vieja, quien gritaba como nunca la había escuchado…
Mientras Alma me jineteaba, Jazmín me acariciaba las bolas y se toqueteaba… Alma no tardó en llegar al orgasmo… gimió, grito y clavo sus uñas en mi hombro y cuello…
Yo aún no estaba lleno, quería probar a Jazmín y así lo hice… me quite a Alma de encima, lenguetíe la rajita a Jazmín, la cual tenía aún residuos de su orgasmo y sin decirle “agua va” se la deje ir hasta el fondo… su textura era diferente, más estrecha y de movimientos más marcados que Silvia y Alma.
Estaba extasiado…!!! Tenía a cuatro patas a Jazmín y ese bello y carnoso culo me golpeaba mi pelvis… “se estaba matando sola!!!”
Pero lo que más me sorprendió fue ver a Silvia empinada y a Carlos dándole duro por el culo… diciéndole:
“¿Así te gusta … recuerdas cuando te rompí el culo por primera vez?”
Y ella contestaba…
-“sii –siii”-
No estaba enojado, simplemente sorprendido… a mi nunca me dio el culo… ¿acaso lo tenía reservado para él?
Decidí aventurarme… ella era mi esposa, me zafe de Jazmín y le metí la verga a Silvia en la boca… mientras Alma se acostaba sobre los huevos de Carlos y los acariciaba
Carlos dejo de coger a Silvia y saco su verga y se vino en la cara de Alma…bañándola de semen…en ese momento, decidí atacar…aún estaba empinada Silvia y le metí la verga por el culo…
Mientras tanto Alma y Jazmín le mamaban la verga a Carlos, limpiándole todo residuo de leche que dejo…
Al son de mis movimientos, Silvia me decía agitadamente:
-“Te amo, Te amo… hay mi amor”-
Note que sus palabras eran una forma de excusarse por haberle dado el culo a Carlos… no le preste atención, al fin y a cabo seguiría cogiéndome a mis cuñadas…
Era fenomenal lo que veía y sentía… en el momento en que Jazmín me acarició con su lengua mis huevos… sentí una explosión de leche que reboto en las entrañas de Silvia…quien tenía la cara pegada al piso y el pelo enmarañado… saque mi verga aún parada y Alma ni tonta ni perezosa se comió las sobras…
Estaba sudado, agotado, extasiado, quería repetirlo…sólo me quedaba una duda: ¿Cuánto tiempo habrá tenido Carlos a Alma, Silvia y Jazmín como sus putitas particulares? ¿También serán las mías ahora?
La noche durante la cena después del encuentro entre Carlos, Alma y yo, transcurrió con cierta normalidad, al menos para ellos, yo me sentía como “ido”, contrariado, nervioso y con la cruda del remordimiento por la aventura que habíamos tenido. Siempre había sido, en mis dos años de casado, fiel y no me había acostado con ninguna otra mujer hasta que se apareció Almita. Mi esposa Silvia notó mi falta de interés en sus conversaciones y me pregunto que tenía…
-Nada- conteste…
Al acostarme no dejaba de pensar en Alma… no conciliaba el sueño y empecé a escuchar ruidos en el en el cuarto contiguo, donde se encontraba mi cuñada Jazmín, quien debo decir, que es la hermana menor de mi esposa, tiene unos 23 años, soltera, sin novio a la vista, pelo castaño ondulado, estura media, cara bonita y fina…tetas pequeñas pero un culazo fenomenal… la clásica nalgona sin chiches.
Volteé a ver a Silvia, quien dormía profunda y plácidamente, me levante para saber que estaba sucediendo, salí del cuarto y me dirigí a la puerta del cuarto de Jazmín… y logre claramente escuchar el gemido de ella… no me anime a tocar… me quede petrificado!!! ¿Se estará toqueteando? ¿Mi cuñado le estará haciendo compañía? o ¿será alguien más?
¿Qué hago?- pensaba… me acerque y toque la perilla y lentamente le di vuelta…estaba abierta su recamara!!!!! Rogando porque no hiciera ruido la puerta, la abrí lentamente y alcance a ver por el pequeño espacio que deja una puerta apenas abierta y la poca claridad de una lámpara encendida, que se encontraba recostada boca arriba y percibí su cara excitada y el zumbido de un aparato el cual no alcanzaba a ver… si, se estaba dando “justicia por su propia mano”.
Me puso cachondísimo escuchar sus gritos de placer y ver su cara ruborizada, qué era lo único que percibía… mi verga se paro brutalmente, quería entrar y comerle todo su coñito y cogérmela pasionalmente. Pero mi esposa en el cuarto de lado me detenía, aún sentía remordimiento por lo de Alma…
La ví a hasta que concluyó y decidí no correr riesgos, me fui a mi cuarto y no pude hacer más que despertar a Silvia y hacerla presa de mi lujuria. Debo decir que de recordar simplemente lo poco que vi de Jazmín y las imágenes de Alma cuando me la cogía, hizo que durara muy poco el acto y a los pocos minutos me vine abundantemente en el interior de Silvia, quien se dio la vuelta para seguir durmiendo.
El día siguiente transcurrió con normalidad, fuimos a la playa los 5, y me quede con Carlos en una palapa, tomándonos unas cervezas mientras que las mujeres en sus bikinis se bañaban cómodamente. Eran la atracción de la playa, no había hombre o mujer que las mirara, unos con deseos y otras con envida… y es que la verdad… viéndolas objetivamente: que buenas estaban…!!!
Llego la noche y me sentía más animado… la cena, el vino, la plática, hicieron que me despejara y estuviera más cariñoso de lo normal con Silvia.
Al tenor de las copas, que ya eran muchas, nadie se encontraba en su cinco sentidos, Alma propuso jugar "Atrevete".
“Atrevete”, es un juego donde seleccionas una carta cuando te toca el turno y debes aceptar el "atrevimiento" o decir un secreto o pensamiento propio que sea “atrevido” de alguna de las personas que se encuentra jugando… la verdad muy tonto el jueguito, creo que alguna vez lo jugué en secundaria.
Iniciamos el juego y la verdad, estaba muy divertido, hasta que Jazmín osadamente dijo:
- “Mejor… cambiamos los secretos por deshacernos de prendas…”
Me quede anonadado!!! Y más aún porque Silvia asintió alegremente.
Alma empezó temerariamente, cuando fue su turno, en lugar de darle un beso en el pie a su hermana Jazmín, decidió deshacerse de la parte superior del traje de baño.
Cuando menos pensamos, estamos en un camino sin retorno, veo a Silvia sin bragas a Alma en pelotas al igual que Jazmín quien enseña su hermosa puchita bien depiladita con un sólo con un par de calcetas.
Carlos, fue el mejor librado, puesto que aún traía un short puesto, y yo en un calzón. El siguiente reto detonó la pasión de los cinco y lo propuso mi esposa…
- “Que Alma le mame la verga a Carlos”-
No puedo creerlo…!!!! Todos se ríen y empiezo a ver como Carlos se saca su falo y Alma empieza a tocarlo, siento una erección que no puedo evitar que se note, de la cual saca provecho mi esposa quien me acaricia por encima de mi calzón y veo como Jazmín intenta desviar la vista de la acción por pena.
Cuando menos pienso Alma le está mamando el pene a Carlos y le acaricia los huevos y Silvia saca mi verga y juguetea con ella, mientras la beso en su cuello; Jazmín intenta despedirse vanamente, pero es detenida por Carlos quien le dice:
-“Quédate, vamos a divertirnos mejor”.-
Ella contesta indecisa:
- “No se qué va a pensar Beto” (yo)-
Alma le refuta:
- “Anda… no tengas pena… no será la primera vez y Beto lo tienen entretenido Silvia”-
Pensé: Madres…!!!! ¿¿¿o séase que estos 3 ya cogían??
En eso Carlos lentamente baja su cabeza a la altura del vientre de Jazmín, e introduce su lengua en el bizcochito de esta, mientras Alma le da una mamada descomunal.
Estaba cachondismo y quería participar con ellos, pero no sabía cómo reaccionaría Silvia, así que decidí quedarme con ella… mientras acaricio sus senos, deslizo mi otra mano hasta su montículo y jugueteó con su clítoris, pero no puede dejar de reaccionar a mis manos e inmediatamente me bajo a probar su delicioso néctar y acariciar con mi lengua su bello botón.
Estaba tan ensimismado en darle placer a Silvia, que no me di cuenta que Carlos estaba dándole su ración de verga a Jazmín a quien tenía empinada y Alma le acariciaba los huevos… me moría por estar en el lugar de Carlos.
Al notar que los observe de reojo, Alma gateo hasta mi y sin más ni más, y sin pedirle permiso a Silvia, se metió toda mi verga a su boca… era un placer descomunal a una la chupaba y otra me la chupaba… y al fondo, mi concuño y mi cuñada dándose placer… y ésta última gritando abiertamente y teniendo un orgasmo brutal al grado que dejo todo el falo lleno de su néctar blanco.
Carlos, se dirigió hacia nosotros pensé que se cogería a Alma por la posición empinada que tenía y oohh sorpresa se dirigió a Silvia y le dijo:
-“Toma putita… prueba mi verga y los jugos de tu hermana”-
Silvia tomo el pene de Carlos y se los metió a su boca, mientras yo le daba una serie de lengüetazos a su clítoris y Alma me trabajaba los huevos.
Al notar la acción de Silvia con Carlos, me separe y bese apasionadamente a Alma, y al fondo en el sillón donde se la había cogido Carlos, se encontraba Jazmín metiéndose los dedos a su puchita… era mi oportunidad!!!
Levante a Alma y la obligue a que me agarrara la verga y que me dirigiera con Jazmín… llegando al punto donde ésta se encontraba, sabía a lo que iba y me recibió con una senda mamada y se le unió Alma… era un placer inmenso!!! Dos hermanas mamándote la verga no se da todos los días!!!
Alma se levanto y me empujo al mueble, y me montó… no había caído en la cuenta que Carlos estaba en el piso haciendo presa una enorme cogido a mi vieja, quien gritaba como nunca la había escuchado…
Mientras Alma me jineteaba, Jazmín me acariciaba las bolas y se toqueteaba… Alma no tardó en llegar al orgasmo… gimió, grito y clavo sus uñas en mi hombro y cuello…
Yo aún no estaba lleno, quería probar a Jazmín y así lo hice… me quite a Alma de encima, lenguetíe la rajita a Jazmín, la cual tenía aún residuos de su orgasmo y sin decirle “agua va” se la deje ir hasta el fondo… su textura era diferente, más estrecha y de movimientos más marcados que Silvia y Alma.
Estaba extasiado…!!! Tenía a cuatro patas a Jazmín y ese bello y carnoso culo me golpeaba mi pelvis… “se estaba matando sola!!!”
Pero lo que más me sorprendió fue ver a Silvia empinada y a Carlos dándole duro por el culo… diciéndole:
“¿Así te gusta … recuerdas cuando te rompí el culo por primera vez?”
Y ella contestaba…
-“sii –siii”-
No estaba enojado, simplemente sorprendido… a mi nunca me dio el culo… ¿acaso lo tenía reservado para él?
Decidí aventurarme… ella era mi esposa, me zafe de Jazmín y le metí la verga a Silvia en la boca… mientras Alma se acostaba sobre los huevos de Carlos y los acariciaba
Carlos dejo de coger a Silvia y saco su verga y se vino en la cara de Alma…bañándola de semen…en ese momento, decidí atacar…aún estaba empinada Silvia y le metí la verga por el culo…
Mientras tanto Alma y Jazmín le mamaban la verga a Carlos, limpiándole todo residuo de leche que dejo…
Al son de mis movimientos, Silvia me decía agitadamente:
-“Te amo, Te amo… hay mi amor”-
Note que sus palabras eran una forma de excusarse por haberle dado el culo a Carlos… no le preste atención, al fin y a cabo seguiría cogiéndome a mis cuñadas…
Era fenomenal lo que veía y sentía… en el momento en que Jazmín me acarició con su lengua mis huevos… sentí una explosión de leche que reboto en las entrañas de Silvia…quien tenía la cara pegada al piso y el pelo enmarañado… saque mi verga aún parada y Alma ni tonta ni perezosa se comió las sobras…
Estaba sudado, agotado, extasiado, quería repetirlo…sólo me quedaba una duda: ¿Cuánto tiempo habrá tenido Carlos a Alma, Silvia y Jazmín como sus putitas particulares? ¿También serán las mías ahora?
