El_Bamboochas
Bovino maduro
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- 19 Jun 2009
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Para mi era un sábado como cualquier otro, me conecté con una vieja a la que le traigo ganas y me fui al cine con ella y dije: “Pues veamos qué pasa”, salí de trabajar, me fui a la casa de volada a echar un baño y fui por ella, ya después del cine (en donde no pasó nada) nos fuimos a sentar a platicar a un parquecito que está cerca del cine, resulta que dicha chava va una iglesia y total que la fui a dejar a su casa cerca de las 12 de la noche y no pasó nada de lo que yo quería pues ella no se prestó para eso.
Ella vive cerca de mi casa, así que después de ir a dejarla me fui caminando a mi casa; cuando ya faltaban cerca de tres cuadras para llegar suena mi celular y eran unos cuates que me invitaron a cotorrear, no traían nenas, así que dije: “Pues haber si nos lanzamos al antro y contacto una lady”… cosa que no sucedió pues mis compas sólo traían intenciones de emborracharse así que pensé que sería una noche más de decir idioteces, reírme mucho y llegar hasta la madre de pedo a mi casa…
Cerca de las 3 de la mañana suena de nuevo mi celular y era otro amigo, quien digamos que no sufre por dinero pues en su chamba le va muy bien, excelentemente bien diría yo, me invitó al table dance y dijo que por dinero no me preocupara y ya andando en el cotorreo pensé que pues al menos me iría a ver viejas encueradas…
Llegamos ahí, obvio las chelas y a ver las viejas, mi amigo me dijo: “Con confianza carnal, la vieja que quieras te pago un privado”; total que después de ver bailar a varias hubo una que me llamó la atención mucho: alta, rubia, ojos color miel, excelente cuerpo y, sinceramente, algo madura, unos 30 o 35 años diría yo, pero de muy buenos bigotes-Quiero un privado con esa- dije sin pensarlo y me fui con ella, estuvo majestuoso la verdad, sus pechos eran enormes, no me cabían en las manos y ¡Vaya que tengo manos grandes!... Su trasero era perfectamente redondo, respingado y apetecible-Pégame, nalguéame papi-me decía una y otra vez, yo lo hacía mientras acariciaba su clítoris delicada y excitantemente a la vez; terminó el privado e inmediatamente se sentó en nuestra mesa, estuvo allí cerca de 10 minutos platicando conmigo, le llamaron la atención por estar mucho tiempo conmigo sin consumir pero a ella pareció no importarle; mi amigo eligió a otra y se fue con ella al privado, yo le pagué una copa a Daniela (ese era su nombre) y se la tomó lentamente, la mayoría del tiempo se la pasó acariciándome y besándome la oreja mientras rosaba con su mano mi pene por encima del pantalón repitiéndome que lo tenía muy “duro”, mi amigo salió del privado y también le pagó una copa a la bailarina con la que él disfrutó el privado; platicábamos, reíamos y constantemente ella me decía en el oído: “Me gustas, me gustas, haces que me moje, eres un niño para mí pero no sé por qué me gustas”, obvio pensé que lo decía sólo para que siguiera pagándole privados y copas; como yo no estaba pagando y mi cuate ya me había dicho que le pidiera las copas que yo quisiera pues él las pagaría pues no le di importancia a sus comentarios continué con ella un buen tiempo más; no sé en otros lados pero aquí, donde yo vivo, los table dance cierran regularmente a las 5am y pues en ese momento ya era la hora de cerrar, hicieron el anunció desde la cabina que se cerraría el lugar y nosotros procedimos a despedirnos de ellas; ellas se miraron entre sí, voltearon a vernos y nos dijeron: “¿Por qué no nos esperan afuera?.
Al poco tiempo salieron y nos fuimos para el hotel donde ellas se hospedaban, dijeron que sólo se darían un baño y nos iríamos, entramos a su habitación para esperarlas, inmediatamente se desnudaron y se metieron a bañar juntas, yo estaba que echaba humo al oírlas reírse dentro del baño así que les dije que me dieran permiso de pasar a orinar, dijeron que sí y entre, inmediatamente me jalaron hacía la regadera y me desnudaron, las dos me besaban en los oídos, la boca, el cuello, el pecho, el abdomen y así poco a poco llegaron a mi pene, una de ellas se lo introducía en la boca y me lo mamaba mientras la otra hacia lo mismo con mis bolas, después una por una se turnaban para darme mamadas, después se besaban mientras me la jalaban, yo no lo podía creer, en ese momento mi amigo abrió la puerta y una de ellas se abalanzó sobre él tumbándolo en la cama y comenzó a desnudarlo; Daniela, la que se quedó conmigo en la regadera continuaba mamando mi pene mientras se masturbaba, yo oprimía sus grandes tetas con fuerza y jalaba de sus pezones constantemente y ella sólo sollozaba y decía en voz baja: “Me encantas papi, me encantas papi”, la levanté, la volteé e introduje mi pene en ella fuertemente, soltó un gran grito, como gata en brama y comencé a meterla y sacarla rápidamente mientras ella se tomaba con fuerza de la pared del baño para no golpearse contra ella, gemía de placer mientras yo le daba de nalgadas en sus nalgas blancas y redonditas, las apretaba y le decía: “Grita más fuerte, grita más fuerte” al tiempo que aumentaba el ritmo de mis penetraciones, ella ya se veía y se oía cansada pero aún así me pedía más, en el baño había una pequeña silla sobre la cual me senté y la invité a sentarse sobre mi pene, cosa que obedeció con rapidez, con mi mano estimulaba su clítoris y ella sólo se dedicaba a gemir de placer, después la cargué y la llevé así hasta la cama, la acosté de lado y seguí follándola, con una mano le acariciaba el clítoris y con la otra apretaba su pecho mientras, en la otra cama, mi amigo hacía lo propio con Gissel, yo sólo oía sus gemidos pues no podía dejar de ver a la chulada de vieja a la que me estaba cogiendo, la puse en cuatro y comencé a follarla de nuevo, mis bolas rebotaban en ella y se oía en todo el cuarto, de pronto con una de sus manos agarró mi polla y se la puso en el ano, no hizo falta lubricar con nada pues ella estaba súper mojada y sus mismos jugos sirvieron como lubricante, la primera vez gimió más fuerte que las veces anteriores pero aún así la introduje hasta el fondo y la monté como lo hace un semental con una yegua, de pronto vi que Gissel acercó su vagina a la boca de Daniela y ella comenzó a lamerla, volteé a donde mi amigo y lástima, él se había dormido (le hicieron efecto las chelas), saqué mi pene del ano de Daniela y lo agité mostrándoselo a Gissel, ella, sin dudarlo, retiró su vagina de la boca de Daniela y comenzó a mamármela, Daniela la siguió, me acosté boca-arriba en la cama y tomé a Gissel y, también boca-arriba sobre de mi, se le empecé a meter una y otra vez mientras Daniela chupaba mis bolas con avidez, entre el mete y saca mi pene se salió de la vagina de Gissel y Daniela rápidamente procedió introducírselo de nuevo, pero ahora en el ano, también ella soltó un gritó muy fuerte y Daniela se la sacó inmediatamente, me lubricó el falo con su saliva y se lo volvió a introducir en el ano a Gissel, quien me pedía más y más, así estuve un tiempo cuando de pronto sentí ganas de eyacular y saqué mi pene de su ano y lancé un gran chorro de leche que cayó en las grandes tetas de Daniela; Gissel sin importarle nada me la empezó a mamar como si fuera la última verga del planeta y me hizo echar más semen, el cual fue directo a su boca…
…Inmediatamente después de eso ellas se dieron un regaderazo mientras yo sacaba mi ropa húmeda del baño, me vestí y desperté a mi amigo, siendo ya casi las 7am salimos de ahí con los teléfonos de ellas y, al menos yo, bien ordeñado y feliz de haber cumplido una de mis fantasías en realidad.
Eso sucedió hace 6 meses, cada vez que ellas vienen a mí ciudad (aproximadamente cada 2 meses) me mandan mensaje o me llaman y voy a su hotel a hacer mis fantasías realidad con ellas y si se lo preguntan: Sí, me dijeron que ya no llevara a mi amigo porque él se duerme.
NOTA: Una disculpa si mi manera de escribir y relatar la historia no es muy buena pero es que es la primera ocasión en que hago un “Relato Erótico”… Espero y les haya gustado.
:metal::metal::metal::metal::metal::metal::metal::metal:
Ella vive cerca de mi casa, así que después de ir a dejarla me fui caminando a mi casa; cuando ya faltaban cerca de tres cuadras para llegar suena mi celular y eran unos cuates que me invitaron a cotorrear, no traían nenas, así que dije: “Pues haber si nos lanzamos al antro y contacto una lady”… cosa que no sucedió pues mis compas sólo traían intenciones de emborracharse así que pensé que sería una noche más de decir idioteces, reírme mucho y llegar hasta la madre de pedo a mi casa…
Cerca de las 3 de la mañana suena de nuevo mi celular y era otro amigo, quien digamos que no sufre por dinero pues en su chamba le va muy bien, excelentemente bien diría yo, me invitó al table dance y dijo que por dinero no me preocupara y ya andando en el cotorreo pensé que pues al menos me iría a ver viejas encueradas…
Llegamos ahí, obvio las chelas y a ver las viejas, mi amigo me dijo: “Con confianza carnal, la vieja que quieras te pago un privado”; total que después de ver bailar a varias hubo una que me llamó la atención mucho: alta, rubia, ojos color miel, excelente cuerpo y, sinceramente, algo madura, unos 30 o 35 años diría yo, pero de muy buenos bigotes-Quiero un privado con esa- dije sin pensarlo y me fui con ella, estuvo majestuoso la verdad, sus pechos eran enormes, no me cabían en las manos y ¡Vaya que tengo manos grandes!... Su trasero era perfectamente redondo, respingado y apetecible-Pégame, nalguéame papi-me decía una y otra vez, yo lo hacía mientras acariciaba su clítoris delicada y excitantemente a la vez; terminó el privado e inmediatamente se sentó en nuestra mesa, estuvo allí cerca de 10 minutos platicando conmigo, le llamaron la atención por estar mucho tiempo conmigo sin consumir pero a ella pareció no importarle; mi amigo eligió a otra y se fue con ella al privado, yo le pagué una copa a Daniela (ese era su nombre) y se la tomó lentamente, la mayoría del tiempo se la pasó acariciándome y besándome la oreja mientras rosaba con su mano mi pene por encima del pantalón repitiéndome que lo tenía muy “duro”, mi amigo salió del privado y también le pagó una copa a la bailarina con la que él disfrutó el privado; platicábamos, reíamos y constantemente ella me decía en el oído: “Me gustas, me gustas, haces que me moje, eres un niño para mí pero no sé por qué me gustas”, obvio pensé que lo decía sólo para que siguiera pagándole privados y copas; como yo no estaba pagando y mi cuate ya me había dicho que le pidiera las copas que yo quisiera pues él las pagaría pues no le di importancia a sus comentarios continué con ella un buen tiempo más; no sé en otros lados pero aquí, donde yo vivo, los table dance cierran regularmente a las 5am y pues en ese momento ya era la hora de cerrar, hicieron el anunció desde la cabina que se cerraría el lugar y nosotros procedimos a despedirnos de ellas; ellas se miraron entre sí, voltearon a vernos y nos dijeron: “¿Por qué no nos esperan afuera?.
Al poco tiempo salieron y nos fuimos para el hotel donde ellas se hospedaban, dijeron que sólo se darían un baño y nos iríamos, entramos a su habitación para esperarlas, inmediatamente se desnudaron y se metieron a bañar juntas, yo estaba que echaba humo al oírlas reírse dentro del baño así que les dije que me dieran permiso de pasar a orinar, dijeron que sí y entre, inmediatamente me jalaron hacía la regadera y me desnudaron, las dos me besaban en los oídos, la boca, el cuello, el pecho, el abdomen y así poco a poco llegaron a mi pene, una de ellas se lo introducía en la boca y me lo mamaba mientras la otra hacia lo mismo con mis bolas, después una por una se turnaban para darme mamadas, después se besaban mientras me la jalaban, yo no lo podía creer, en ese momento mi amigo abrió la puerta y una de ellas se abalanzó sobre él tumbándolo en la cama y comenzó a desnudarlo; Daniela, la que se quedó conmigo en la regadera continuaba mamando mi pene mientras se masturbaba, yo oprimía sus grandes tetas con fuerza y jalaba de sus pezones constantemente y ella sólo sollozaba y decía en voz baja: “Me encantas papi, me encantas papi”, la levanté, la volteé e introduje mi pene en ella fuertemente, soltó un gran grito, como gata en brama y comencé a meterla y sacarla rápidamente mientras ella se tomaba con fuerza de la pared del baño para no golpearse contra ella, gemía de placer mientras yo le daba de nalgadas en sus nalgas blancas y redonditas, las apretaba y le decía: “Grita más fuerte, grita más fuerte” al tiempo que aumentaba el ritmo de mis penetraciones, ella ya se veía y se oía cansada pero aún así me pedía más, en el baño había una pequeña silla sobre la cual me senté y la invité a sentarse sobre mi pene, cosa que obedeció con rapidez, con mi mano estimulaba su clítoris y ella sólo se dedicaba a gemir de placer, después la cargué y la llevé así hasta la cama, la acosté de lado y seguí follándola, con una mano le acariciaba el clítoris y con la otra apretaba su pecho mientras, en la otra cama, mi amigo hacía lo propio con Gissel, yo sólo oía sus gemidos pues no podía dejar de ver a la chulada de vieja a la que me estaba cogiendo, la puse en cuatro y comencé a follarla de nuevo, mis bolas rebotaban en ella y se oía en todo el cuarto, de pronto con una de sus manos agarró mi polla y se la puso en el ano, no hizo falta lubricar con nada pues ella estaba súper mojada y sus mismos jugos sirvieron como lubricante, la primera vez gimió más fuerte que las veces anteriores pero aún así la introduje hasta el fondo y la monté como lo hace un semental con una yegua, de pronto vi que Gissel acercó su vagina a la boca de Daniela y ella comenzó a lamerla, volteé a donde mi amigo y lástima, él se había dormido (le hicieron efecto las chelas), saqué mi pene del ano de Daniela y lo agité mostrándoselo a Gissel, ella, sin dudarlo, retiró su vagina de la boca de Daniela y comenzó a mamármela, Daniela la siguió, me acosté boca-arriba en la cama y tomé a Gissel y, también boca-arriba sobre de mi, se le empecé a meter una y otra vez mientras Daniela chupaba mis bolas con avidez, entre el mete y saca mi pene se salió de la vagina de Gissel y Daniela rápidamente procedió introducírselo de nuevo, pero ahora en el ano, también ella soltó un gritó muy fuerte y Daniela se la sacó inmediatamente, me lubricó el falo con su saliva y se lo volvió a introducir en el ano a Gissel, quien me pedía más y más, así estuve un tiempo cuando de pronto sentí ganas de eyacular y saqué mi pene de su ano y lancé un gran chorro de leche que cayó en las grandes tetas de Daniela; Gissel sin importarle nada me la empezó a mamar como si fuera la última verga del planeta y me hizo echar más semen, el cual fue directo a su boca…
…Inmediatamente después de eso ellas se dieron un regaderazo mientras yo sacaba mi ropa húmeda del baño, me vestí y desperté a mi amigo, siendo ya casi las 7am salimos de ahí con los teléfonos de ellas y, al menos yo, bien ordeñado y feliz de haber cumplido una de mis fantasías en realidad.
Eso sucedió hace 6 meses, cada vez que ellas vienen a mí ciudad (aproximadamente cada 2 meses) me mandan mensaje o me llaman y voy a su hotel a hacer mis fantasías realidad con ellas y si se lo preguntan: Sí, me dijeron que ya no llevara a mi amigo porque él se duerme.
NOTA: Una disculpa si mi manera de escribir y relatar la historia no es muy buena pero es que es la primera ocasión en que hago un “Relato Erótico”… Espero y les haya gustado.
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