Este relato es continuación del primer relato que publiqué, es una fantasía que tengo.
Cómo dije en el anterior relato, mi esposa es una mujer bellísima, blanca de piel y con una altura de 1.62, tiene unos pechos normales pero muy firmes y apetecibles, lo principal son sus pompas, muy paraditas y con unas piernas torneadas que invitan a recorrerlas.
Bueno, inicio con el relato...
Preguntándole por enésima ocasión a mi esposa y creyendo que si se había quedado con la espinita de no haber podido tener relaciones en aquella ocasión, a lo que ella me responde que porqué quiero saber si ahora estamos felizmente casados.
Yo le menciono que si tiene la espinita podría darle permiso para sacarse esa espinita y probar algo diferente, pues yo he sido el único hombre en su vida.
Me pregunta ella si es verdad a lo que le digo que si, es más que pruebe a buscarlo en Facebook y que entable conversación con el para ver qué sucede.
Así, lo buscamos en la red social, rápidamente dando con el, los primeros días fueron pláticas normales hasta que rememoraron la situación que vivieron en su época universitaria, ella le preguntó si se quedó con la espinita de esa vez, a lo que él respondió que si. Noté que se había emocionado mi esposa con la respuesta y le dije que programara otra plática para ver si se podía dar.
Antes que iniciara la plática le pedí a mi esposa que vistiera con una blusa blanca y sin brasier, y una tanga de hilo solamente, ella me cuestionó pero en la emoción aceptó y lo hizo.
Ya en la plática el se sentía un poco incrédulo que ella quisiera revivir ese momento, por lo que le dije a mi esposa que le enviara una foto así como estaba para que viera que era en serio, aceptó y le tome dos fotos, una de frente con la blusa abierta dejando ver parte de sus pechos y una de espaldas dejando ver esas increíbles pompas con el fino hilo dental que apenas cubría algo.
Al ver las fotos cambió la forma de platicar del chavo, el cual puso fecha y hora para la sesión, yo le dije a mi esposa que estaba bien y para terminar que le hiciera una videollamada donde le mostrará todo lo que comería, lo cual hizo, activó la videollamada e inmediatamente el vio como se quitaba la blusa dejando ver sus pechos con sus pezones rosaditos, poco a poco se quitó la tanga, mostrando su monte de Venus rasurado y unos labios hinchados que pedían a gritos ser penetrados, terminaron la videollamada y enseguida tuvimos una sesión de sexo como nunca antes.
Llegó el día del permiso y me dijo que podía cancelarlo, yo le dije que no, que quería que disfrutara, pero que me contara lo que pasara, a lo que ella me dijo, mejor llevo la cámara y después te muestro todo lo que pasó.
Los sucesos:
Ya en la habitación del motel empiezan a platicar, el le pregunta el porque quería hacerlo, a lo que ella le dice que solo era quitarse un fijación y complacer mi fantasía. Inician con unos besos apasionados, sobando inmediatamente sus pechos por encima del vestido que llevaba, ella toma la iniciativa y le quita la playera y el pantalón en seguida, diciéndole que ahora el iba a terminar desnudo primero, el mete su mando debajo de la falda, acariciando sus piernas y diciéndole que luce igual que cuando sucedió su casi primera vez, le quita el vestido, dejándola solo en tanga, pues no llevaba bra. Empieza a succionar sus pezones mientras ella suelta un leve gemido (mientras veo el video no puedo evitar excitarme y enfadarme a la vez, pero me gusta). Ella le quita el boxer y empieza a masajear su miembro ya erecto, se separa de el y lo avienta a la cama, mientras le da un beso y empieza a bajar el beso por su torso llegando a su miembro, al cuál empieza a lamer suavemente, lo introduce en su boca mientras con una mano juega con sus bolas (es una maestra de sexo oral), el solo logra mirar hacia el techo. La separa de el y la recuesta en la cama, quitándole la tanga le abre el compás y empieza a besar su vagina introduciendo la lengua, logrando arrancar un fuerte gemido de ella, sube a sus pechos y muerde suavemente sus pezones mientras empieza a introducir su miembro en ella, ella solo logra arañarlo por la espalda y lo hace introcudirle todo el miembro de un solo golpe, lo toma de las nalgas para que la bombee más duro, después ella lo pone abajo y se monta como solo ella sabe, unos movimientos circulares que parecieran querer ordeñar su miembro lo más rápido posible, el solo la toma de las nalgas y le suelta una nalgada fuerte a la cual ella corresponde con unos sentones brutales. Esta a punto de correrse cuando el le pide ponerla en 4 y entrar por detrás, ella le dice que no lo ha hecho así conmigo pero no quiere arrepentirse de nada de este día así que se coloca en cuatro puntos, el apunta su miembro al orificio trasero de mi mujer e ingresa por ese lugar que yo no pude, ella estaba posesa durante el bombeo pidiendo que le diera más duro mientras el le daba unas nalgadas tan sonoras que alcanzaba a escuchar aunque la cámara no tenía buen sonido, el el comentó que estaba por terminar y ella le dijo que lo hiciera dentro, los dos terminaron exhaustos mientras ella seguía jugando con el pene de él, logrando que volviera a pararse para una segunda sesión increíble, una vez terminado ella le mencionó que era la única y última vez, por lo que no propusiera volver a hacerlo. Yo cuando me di cuenta me había corrido sin siquiera tocarme al ver el vídeo donde alguien había poseído a mi mujer.
Cómo dije en el anterior relato, mi esposa es una mujer bellísima, blanca de piel y con una altura de 1.62, tiene unos pechos normales pero muy firmes y apetecibles, lo principal son sus pompas, muy paraditas y con unas piernas torneadas que invitan a recorrerlas.
Bueno, inicio con el relato...
Preguntándole por enésima ocasión a mi esposa y creyendo que si se había quedado con la espinita de no haber podido tener relaciones en aquella ocasión, a lo que ella me responde que porqué quiero saber si ahora estamos felizmente casados.
Yo le menciono que si tiene la espinita podría darle permiso para sacarse esa espinita y probar algo diferente, pues yo he sido el único hombre en su vida.
Me pregunta ella si es verdad a lo que le digo que si, es más que pruebe a buscarlo en Facebook y que entable conversación con el para ver qué sucede.
Así, lo buscamos en la red social, rápidamente dando con el, los primeros días fueron pláticas normales hasta que rememoraron la situación que vivieron en su época universitaria, ella le preguntó si se quedó con la espinita de esa vez, a lo que él respondió que si. Noté que se había emocionado mi esposa con la respuesta y le dije que programara otra plática para ver si se podía dar.
Antes que iniciara la plática le pedí a mi esposa que vistiera con una blusa blanca y sin brasier, y una tanga de hilo solamente, ella me cuestionó pero en la emoción aceptó y lo hizo.
Ya en la plática el se sentía un poco incrédulo que ella quisiera revivir ese momento, por lo que le dije a mi esposa que le enviara una foto así como estaba para que viera que era en serio, aceptó y le tome dos fotos, una de frente con la blusa abierta dejando ver parte de sus pechos y una de espaldas dejando ver esas increíbles pompas con el fino hilo dental que apenas cubría algo.
Al ver las fotos cambió la forma de platicar del chavo, el cual puso fecha y hora para la sesión, yo le dije a mi esposa que estaba bien y para terminar que le hiciera una videollamada donde le mostrará todo lo que comería, lo cual hizo, activó la videollamada e inmediatamente el vio como se quitaba la blusa dejando ver sus pechos con sus pezones rosaditos, poco a poco se quitó la tanga, mostrando su monte de Venus rasurado y unos labios hinchados que pedían a gritos ser penetrados, terminaron la videollamada y enseguida tuvimos una sesión de sexo como nunca antes.
Llegó el día del permiso y me dijo que podía cancelarlo, yo le dije que no, que quería que disfrutara, pero que me contara lo que pasara, a lo que ella me dijo, mejor llevo la cámara y después te muestro todo lo que pasó.
Los sucesos:
Ya en la habitación del motel empiezan a platicar, el le pregunta el porque quería hacerlo, a lo que ella le dice que solo era quitarse un fijación y complacer mi fantasía. Inician con unos besos apasionados, sobando inmediatamente sus pechos por encima del vestido que llevaba, ella toma la iniciativa y le quita la playera y el pantalón en seguida, diciéndole que ahora el iba a terminar desnudo primero, el mete su mando debajo de la falda, acariciando sus piernas y diciéndole que luce igual que cuando sucedió su casi primera vez, le quita el vestido, dejándola solo en tanga, pues no llevaba bra. Empieza a succionar sus pezones mientras ella suelta un leve gemido (mientras veo el video no puedo evitar excitarme y enfadarme a la vez, pero me gusta). Ella le quita el boxer y empieza a masajear su miembro ya erecto, se separa de el y lo avienta a la cama, mientras le da un beso y empieza a bajar el beso por su torso llegando a su miembro, al cuál empieza a lamer suavemente, lo introduce en su boca mientras con una mano juega con sus bolas (es una maestra de sexo oral), el solo logra mirar hacia el techo. La separa de el y la recuesta en la cama, quitándole la tanga le abre el compás y empieza a besar su vagina introduciendo la lengua, logrando arrancar un fuerte gemido de ella, sube a sus pechos y muerde suavemente sus pezones mientras empieza a introducir su miembro en ella, ella solo logra arañarlo por la espalda y lo hace introcudirle todo el miembro de un solo golpe, lo toma de las nalgas para que la bombee más duro, después ella lo pone abajo y se monta como solo ella sabe, unos movimientos circulares que parecieran querer ordeñar su miembro lo más rápido posible, el solo la toma de las nalgas y le suelta una nalgada fuerte a la cual ella corresponde con unos sentones brutales. Esta a punto de correrse cuando el le pide ponerla en 4 y entrar por detrás, ella le dice que no lo ha hecho así conmigo pero no quiere arrepentirse de nada de este día así que se coloca en cuatro puntos, el apunta su miembro al orificio trasero de mi mujer e ingresa por ese lugar que yo no pude, ella estaba posesa durante el bombeo pidiendo que le diera más duro mientras el le daba unas nalgadas tan sonoras que alcanzaba a escuchar aunque la cámara no tenía buen sonido, el el comentó que estaba por terminar y ella le dijo que lo hiciera dentro, los dos terminaron exhaustos mientras ella seguía jugando con el pene de él, logrando que volviera a pararse para una segunda sesión increíble, una vez terminado ella le mencionó que era la única y última vez, por lo que no propusiera volver a hacerlo. Yo cuando me di cuenta me había corrido sin siquiera tocarme al ver el vídeo donde alguien había poseído a mi mujer.
