Depende desde que dimensión lo reflexiones. Si lo ves desde la perspectiva biológica hormonal, sería normal que te quiseras coger a tu mamá. Si lo ves desde la dimensión afectivo-emocional, entonces sí hay un desequilibrio ético al respecto. Ya es cuestión de qué te importe más: meter el pito, o mantener vínculos estables con la gente.