Firstoneman:
Si tu chica no quiere tener sexo anal, no significa que te quiera menos, esa es una interpretación errónea de los hombres. Es simplemente un tema delicado donde intervienen temores, prejuicios, factores culturales, etc. Si la obligas a hacer algo que no quiere, inevitablemente la relación terminará deteriorándose.
Así que el primer paso es respetar su opinión. Es muy bueno que ya lo platiquen.
Estoy de acuerdo en que probablemente, al “calor de los hechos”, la situación se pueda dar de manera espontánea, como sugiere xacotzin666, sin embargo, hacerlo “a lo bruto” sin tomar resguardos (protección y lubricación) es muy arriesgado.
Si ambos están de acuerdo deben tener en cuenta lo siguiente:
El esfínter anal y el recto no forman parte del aparato reproductor, por lo que no están preparados naturalmente para el coito.
El esfínter anal es un anillo muscular que posee terminaciones nerviosas y el recto tiene muchos vasos sanguíneos, por lo que la pedicación brusca y/o forzada puede ocasionar daños como pequeñas hemorragias, microdesgarros o heridas, fisuras, dolor, etc., además de mayor riesgo de enfermedades de transmisión sexual e infecciones (para ambos), por el contacto de fluidos, sangre y bacterias.
Para una penetración anal satisfactoria se requiere voluntad, paciencia y excitación.
Es necesario comenzar por una buena estimulación. Se aconsejan masajes circulares primero alrededor del ano y luego sobre este, preferentemente con el dedo muy bien lubricado (con los propios flujos o lubricantes a base de agua). Esto es importante: no dejes de excitar a tu pareja con caricias, besos, etc. en otras zonas del cuerpo. Ayuda mucho que tú o ella misma estimulen su clítoris y/o vagina.
No existen los orgasmos anales. Lo que ocurre es que el orgasmo, que se produce por estimulación del clítoris o vagina, se potencia con la estimulación anal (y la estimulación del útero que se produce vía rectal).
Debes ir despacio. Parar ante cualquier señal de dolor o rechazo de tu compañera.
Penetrar de a poco y detenerte para que el esfínter se adapte a la penetración y se relaje.
Pasado este punto, si efectúas movimientos de vaivén al tiempo que ella suavemente realiza movimientos circulares, aumentará mucho el placer.
Usar lubricante a base de agua ya que los oleosos (como la vaselina) debilitan el condón o preservativo (debido al alto riesgo de infecciones, es recomendable usar condón).
NUNCA pasar de la penetración anal a la vaginal sin antes cambiar de condón o realizar un aseo genital.
AMBOS deberían realizarse una buena higiene previamente. Con una ducha es suficiente (y excitante si lo hacen juntos ¿cierto?), no se necesitan enemas o aseos intestinales.
Finalmente, hay posturas que facilitan la penetración anal como el coito a tergo (de perrito); ella recostada de lado o boca abajo y tú arriba (back swinging); o ella, de espaldas o de frente, sentada sobre ti (esta última permite que sea ella misma quien regule la penetración).
Bueno, ya me explayé demasiado. Perdona la extensión del comentario, sólo espero que ayude a aclarar tus dudas.
Buena suerte y felicidades para ambos.