Bueno amigos bakunos este será un relato de la caliente elación entre mi prima y yo.
Como lo había descrito antes ella y yo después del primer encuentro que tuvimos seguimos viéndonos pero no en la casa sino en otras partes.
Ella salía 1 hora más tarde que yo del trabajo pero yo iba por ella caminando puesto que era muy cerca el sitio de trabajo de ella de mi universidad. Nos Íbamos tal cual novios tomados de la mano y dándonos muchos besos, la relación era fantástica, el peligro tan intenso que se tenia internamente de que nos descubrieran, pero esa sensación de peligro nos excitaba a seguir en esta relación, al principio nadie sospechaba nada puesto que en mi casa no éramos nada explícitos.
El segundo encuentro amoroso tuvo que ser en un motel muy cerca al trabajo de ella, ella estaba muy tensa pero también excitada, le había dicho a su marido que iría a tomar café con algunas amigas, por mi parte dije que iría a la biblioteca.
Comenzamos besándonos apasionadamente dándonos unos grandes y profundos besos, comencé a darle besos por todo el cuerpo, le fui desapuntando la blusa y el brasier ella gemía muy fuerte de la misma excitación que llevaba, comencé a jugar con sus pezones lamiéndolos muy rico y mordiéndolos suavemente, los tenia muy erectos a pesar de no tener grandes proporciones en sus pechos. Ella no dejaba de gemir, seguí besándole todo el cuerpo pasando por su cintura, sus piernas, su vulva la cual ya estaba muy mojadita, comencé a darle unas lamidas las cuales a ella le excitaron bastante, gemía a más no poder, mi lengua comenzó a jugar con su clítoris y mis dedos se fueron insertando poco a poco, en ese momento yo también estaba a mil, ella estaba a toda diciendo que por favor ya se lo metiera, ella estaba teniendo un orgasmo enorme en ese momento.
Ya viéndola completamente dominada por la excitación, decidí penetrarla, cuando lo inserte ella dio un grito salvaje, sabia que en ese lugar no había por que ser recatado, comencé con un bombeo continuo al principio muy suave pero con el tiempo fueron más intensos, ella gemía muy fuerte, estaba totalmente hechizada por el momento, al igual que yo que en ese momento no pensaba en otra cosa más que seguir teniendo sexo con mi querida prima, al correrme dentro de su coño ella se corrió al mismo tiempo y nuestros jugos se mezclaron dentro de su vulva, fue intenso y nada despreciable.
Después de un tiempo en el que estuvimos acostados dándonos besos y jugando con nuestras partes, yo le pregunte si algunas vez había tenido sexo anal, a ella le sorprendió la pregunta pero me dijo que nunca lo había hecho, me pregunto que si acaso yo lo había hecho, yo le dije que sí con una amiga muy caliente que tuve alguna vez que me hiso debutar con ella penetrándola por el ano, yo le pregunte que si quería experimentar con migo, ella al principio dijo que no pero yo utilice mis técnicas de persuasión que termino accediendo pero que fuera con cuidado puesto que sabia que le iba a doler, yo le dije que tendría mucho cuidado.
La lubrique con un lubricante especial que compre en una farmacia. Lo unte por toda la parte del ano, ubique mi falo a la entrada del ano y la fui penetrando lentamente, ella comenzó a gritar muy intensamente, yo no le di mucha importancia a sus gritos que eran de dolor en ese momento, lo termine metiendo completamente y comencé a bombear muy lentamente sin riesgo a que le fuera a hacer daño, ella con el tiempo decía que le gustaba bastante con el tiempo fui bombeando cada vez más y más hasta que la hice llegar a un orgasmo múltiple, ella estaba completamente inmóvil, había quedado sin fuerza después de ese gran orgasmo que había tenido, yo me corrí dentro de su ano dejando sus intestinos llenos de mi leche. Caí totalmente rendido encima de ella después de una excelente faena de sexo, nuestros cuerpos estaban totalmente bañados en sudor.
Nos quedamos un poco más y aprovechamos el tiempo para hablar algunas cosas. Me cometo que si estaba muy excitada esos días era por que su marido hace mucho no la tocaba, su trabajo lo estaba esclavizando mucho y no sentía deseo hacia ella, también creía que posiblemente tenia una amante a lo cual ella le daba mucho crédito. Yo le comente que con migo podía contar cuando quisiera pero que ese juego era muy peligroso, ella estaba consiente de eso pero que no podía evitarlo puesto que yo le gustaba mucho, a mi también ella me gustaba mucho y no podía evitarlo.
Al terminar nos bañamos juntos y nos marchamos, llegamos juntos a la casa con el pretexto de que nos habíamos encontrado en la estación, después de este tuvimos algunos otros encuentros en los cuales siempre practicábamos la misma rutina de sexo.
Gracias por su atención, próximamente publicare más relatos sobre otras experiencias sexuales.
Hasta Pronto
Como lo había descrito antes ella y yo después del primer encuentro que tuvimos seguimos viéndonos pero no en la casa sino en otras partes.
Ella salía 1 hora más tarde que yo del trabajo pero yo iba por ella caminando puesto que era muy cerca el sitio de trabajo de ella de mi universidad. Nos Íbamos tal cual novios tomados de la mano y dándonos muchos besos, la relación era fantástica, el peligro tan intenso que se tenia internamente de que nos descubrieran, pero esa sensación de peligro nos excitaba a seguir en esta relación, al principio nadie sospechaba nada puesto que en mi casa no éramos nada explícitos.
El segundo encuentro amoroso tuvo que ser en un motel muy cerca al trabajo de ella, ella estaba muy tensa pero también excitada, le había dicho a su marido que iría a tomar café con algunas amigas, por mi parte dije que iría a la biblioteca.
Comenzamos besándonos apasionadamente dándonos unos grandes y profundos besos, comencé a darle besos por todo el cuerpo, le fui desapuntando la blusa y el brasier ella gemía muy fuerte de la misma excitación que llevaba, comencé a jugar con sus pezones lamiéndolos muy rico y mordiéndolos suavemente, los tenia muy erectos a pesar de no tener grandes proporciones en sus pechos. Ella no dejaba de gemir, seguí besándole todo el cuerpo pasando por su cintura, sus piernas, su vulva la cual ya estaba muy mojadita, comencé a darle unas lamidas las cuales a ella le excitaron bastante, gemía a más no poder, mi lengua comenzó a jugar con su clítoris y mis dedos se fueron insertando poco a poco, en ese momento yo también estaba a mil, ella estaba a toda diciendo que por favor ya se lo metiera, ella estaba teniendo un orgasmo enorme en ese momento.
Ya viéndola completamente dominada por la excitación, decidí penetrarla, cuando lo inserte ella dio un grito salvaje, sabia que en ese lugar no había por que ser recatado, comencé con un bombeo continuo al principio muy suave pero con el tiempo fueron más intensos, ella gemía muy fuerte, estaba totalmente hechizada por el momento, al igual que yo que en ese momento no pensaba en otra cosa más que seguir teniendo sexo con mi querida prima, al correrme dentro de su coño ella se corrió al mismo tiempo y nuestros jugos se mezclaron dentro de su vulva, fue intenso y nada despreciable.
Después de un tiempo en el que estuvimos acostados dándonos besos y jugando con nuestras partes, yo le pregunte si algunas vez había tenido sexo anal, a ella le sorprendió la pregunta pero me dijo que nunca lo había hecho, me pregunto que si acaso yo lo había hecho, yo le dije que sí con una amiga muy caliente que tuve alguna vez que me hiso debutar con ella penetrándola por el ano, yo le pregunte que si quería experimentar con migo, ella al principio dijo que no pero yo utilice mis técnicas de persuasión que termino accediendo pero que fuera con cuidado puesto que sabia que le iba a doler, yo le dije que tendría mucho cuidado.
La lubrique con un lubricante especial que compre en una farmacia. Lo unte por toda la parte del ano, ubique mi falo a la entrada del ano y la fui penetrando lentamente, ella comenzó a gritar muy intensamente, yo no le di mucha importancia a sus gritos que eran de dolor en ese momento, lo termine metiendo completamente y comencé a bombear muy lentamente sin riesgo a que le fuera a hacer daño, ella con el tiempo decía que le gustaba bastante con el tiempo fui bombeando cada vez más y más hasta que la hice llegar a un orgasmo múltiple, ella estaba completamente inmóvil, había quedado sin fuerza después de ese gran orgasmo que había tenido, yo me corrí dentro de su ano dejando sus intestinos llenos de mi leche. Caí totalmente rendido encima de ella después de una excelente faena de sexo, nuestros cuerpos estaban totalmente bañados en sudor.
Nos quedamos un poco más y aprovechamos el tiempo para hablar algunas cosas. Me cometo que si estaba muy excitada esos días era por que su marido hace mucho no la tocaba, su trabajo lo estaba esclavizando mucho y no sentía deseo hacia ella, también creía que posiblemente tenia una amante a lo cual ella le daba mucho crédito. Yo le comente que con migo podía contar cuando quisiera pero que ese juego era muy peligroso, ella estaba consiente de eso pero que no podía evitarlo puesto que yo le gustaba mucho, a mi también ella me gustaba mucho y no podía evitarlo.
Al terminar nos bañamos juntos y nos marchamos, llegamos juntos a la casa con el pretexto de que nos habíamos encontrado en la estación, después de este tuvimos algunos otros encuentros en los cuales siempre practicábamos la misma rutina de sexo.
Gracias por su atención, próximamente publicare más relatos sobre otras experiencias sexuales.
Hasta Pronto
